
Cuando sopla el silencio
y los zumbidos invaden
su furia escupe el veneno
que comparte este arte.
Sale a caminar por la turbia ciudad
siente risas atrás, pero no quiere mirar
y acelera más y más, empapado en sudor
La Noche invita a explotar.
Esclavo de un sucio amor
que ya no puede dejar
con frío y sed, sin aire va
a buscar su otra mitad.
Nunca más salió el sol.